¡Muy buenas! Hacía tiempo ya que, quitando mis impresiones sobre los eventos especiales, no traía un artículo de opinión al blog. La ocasión lo merece, y es que después de tanto revuelo que se ha formado alrededor de su figura en las últimas semanas, quería dar una opinión amplia al respecto. Dolph Ziggler ha conseguido una oportunidad por el título más importante de la compañía en un momento en el que nadie lo esperaba. ¿Merecido? ¿Regalado? Debatamos.
Dolph Ziggler, para bien o para mal, no ha pasado desapercibido para absolutamente nadie durante su estancia en WWE. Ha ganado partidarios y detractores, alabanzas y críticas, fanboys y haters.
El personaje de Dolph Ziggler comenzó su andadura en 2008, ocho años lleva por lo tanto en la compañía, y pocas veces ha faltado a la cita con los programas semanales y demás eventos, fuesen o no televisados.
A base de buenas actuaciones, consiguió hacerse un hueco y ganar protagonismo en la WWE. En sus primeros años obtuvo el Intercontinental Championship, United States Championship, e incluso el World Heavyweight Championship con la ayuda de Vickie Guerrero, su mánager por aquel entonces. Tenía una buena posición y eso le llevó a convertirse en Mr. Money in the Bank en el año 2012, algo que catapultaría su carrera a lo más alto, siendo la última mitad de ese año y el comienzo del siguiente los mejores en toda su carrera (victorias sobre Randy Orton en Survivor Series, John Cena en TLC o una gran actuación en el Royal Rumble 2013 le avalan). Luego de WrestleMania 29, Dolph Ziggler canjeó su maletín de Money in the Bank y consiguió nuevamente el World Heavyweight Championship. Parecía su momento, con lo bien que le habían cuidado durante todo ese tiempo no parecía que nada pudiera salir mal, pero así fue. Una desafortunada patada de Jack Swagger a su cabeza durante un segmento le hizo perderse su primera defensa titular y terminar perdiendo el campeonato en la primera que tuvo, un mes más tarde de lo previsto.
Todos presagiábamos lo peor a partir de ese momento, terminó su relación con AJ Lee & Big E y comenzó un feudo con ambos, y a partir de ahí fue bajando notablemente en importancia. Parte de culpa también suya por quejarse abiertamente de ello, lo que hizo que, si su importancia había caído para los oficiales, fuese todavía menos tomado en cuenta (un claro ejemplo fue hacerle perder contra Fandango en el Kickoff de TLC 2013, un año después de haber derrotado a John Cena en el mismo evento, casi nada).
A partir de ahí, Dolph Ziggler estuvo realmente enfadado con la compañía, y fue notorio con tweets como este, o con declaraciones como esta. La actitud de la WWE con él no fue la correcta, y menos sabiendo todo el apoyo que tenía por parte del público. Quejarse abiertamente a algunos puede parecerle de "llorón" o "quejica", pero me parece que alzar la voz es la única manera de terminar siendo tomado en cuenta, para bien o para mal. Es algo que quizás aquellas personas que lo consiguen todo de manera sencilla o prácticamente regalada no son capaces de comprender, o aquellos que están conformes con cualquier cosa, o incluso aquellos que su único medio de protesta es un ordenador y no salir a la calle, a todos aquellos no les pido que lo entiendan, nunca sabrán lo que significa pelear por algo.
A partir de ahí fue retomando el vuelo y consiguió tres reinados más como Intercontinental Champion, pero quitando uno, ninguno de gran importancia. Lo mejor que tuvo en esa época fue la impecable actuación en Survivor Series 2014, momento en el que muchos recobraron las esperanzas en volver a tener al Dolph Ziggler de antaño, pero no, fue simplemente un espejismo. Ha tenido oportunidades por títulos secundarios desde entonces pero sin éxito, una historia ridícula con Lana, Rusev y Summer Rae también involucrados, y manteniéndose en la parte baja de la cartelera o siendo utilizado para impulsar a nuevos talentos (Tyler Breeze, Baron Corbin) llegamos a la actualidad.
En la actualidad, tras haberse celebrado el Draft y haber terminado en SmackDown, Dolph Ziggler ha conseguido una oportunidad titular por el cinturón más preciado actualmente en la compañía, el WWE Championship que ostenta Dean Ambrose. Esta oportunidad se la ganó tras haber conseguido la cobertura sobre AJ Styles en un combate donde también estaban Bray Wyatt, John Cena, Apollo Crews y Baron Corbin. Una oportunidad esperada durante años, deseada por muchos, por todos aquellos que le apoyaban, todos aquellos que decían que su talento estaba siendo desaprovechado impulsando talentos, todos aquellos que querían verle con un título alrededor de la cintura, todos aquellos que creían que tenía que salir de ese pozo en el que estaba inmerso... todos aquellos que, de la noche a la mañana, cambiaron de opinión y ya no les gusta lo que durante tanto tiempo pidieron, quizá porque ya pasó de moda o quizá porque el ser humano es inconformista por naturaleza, por lo que sea, han llovido críticas a Dolph Ziggler y WWE por haberle otorgado una oportunidad titular.
Me gusta Dolph Ziggler, no totalmente desde sus inicios pero más desde que comenzó a ser "The Show Off", pero eso no significa que sea ciego o que no sepa ver las cosas como realmente son (algo que sería característico de un fanboy, pero no es el caso). Pese a que llevaba tiempo esperando que Dolph Ziggler recibiese una oportunidad como esta, no creo que sea el momento más indicado haberlo hecho ahora, me explico. Dolph Ziggler acarrea en sus espaldas un mal año 2016, prácticamente todos sus combates importantes se cuentan por derrotas, aunque esto podría tener una explicación bastante simple. Se supone que estamos en la "New Era", que todo lo anterior queda en el pasado... quizá por eso, porque estamos ante una nueva etapa, se dejan esas derrotas y todo lo ocurrido anteriormente en el olvido y comenzamos de cero cambiando la situación de muchos luchadores que antes no tenían tanto protagonismo u oportunidades. Es algo que no funciona en la mente de los aficionados, ya que nosotros siempre hacemos memoria y recordamos lo ocurrido en meses y años anteriores, pero es mi teoría, sea cierta o no lo sea.
Por otro lado, hay otra cosa que tampoco me cuadra de darle una oportunidad titular tan importante a Dolph Ziggler en estos momentos, y es el escenario en donde se llevará a cabo todo esto, nada más ni nada menos que Summerslam, el evento más importante del verano. Tendría más lógica que algo así ocurriese en un Battleground, Hell in a Cell, TLC... pero Summerslam resulta un evento demasiado importante como para ofrecer la oportunidad titular a alguien que lleva años sin recibir una. Es algo que ya he comentado en Twitter, pero resulta más fácil criticar sin saber, supongo.
Pese a todo esto, pienso que Dolph Ziggler lleva trabajando muy duro durante años para llegar a este momento y que este va a ser el premio a su esfuerzo, al haber aguantado carros y carretas durante mucho tiempo, al haber participado en historias sin sentido, al haber ayudado a tantos talentos a lucir mejor en sus combates o simplemente a impulsarlos, un premio basado en la meritocracia. Para los que simplemente sepan catalogar a Dolph Ziggler como un "llorón", aquí les dejo su trabajo durante todos estos años. Es fácil criticar desde la cama o el sofá, pero resulta que partirse la espalda todas las semanas por entretener también merece su recompensa.
No hablo simplemente de mi boca, el propio Dolph Ziggler ha visto con sus propios ojos como la gente que pedía efusivamente una oportunidad para él de repente le han dado la espalda y ahora le critican por "falta de credibilidad" o "meterse en asuntos políticos" (también lo comenté hace relativamente poco por Twitter). Para todos ellos, y aunque yo concuerdo en que no me parece el momento más adecuado para ponerle como retador al título, decirles que es un combate de puro trámite, que Dean Ambrose retendrá el campeonato con total seguridad, que no hace falta alarmarse tanto o hacer campañas donde se demuestre que Dolph Ziggler no merece esa lucha. La tendrá, la están construyendo bien, cumplirá en ella, y se volverá a casa como cualquier otro día, no hace falta armar tanto escándalo. Lo que no está bien es, como dice el propio Dolph Ziggler en su tweet, estar pidiendo una oportunidad para alguien y luego criticarle cuando se la conceden, no resulta lógico, pero eso ya depende más del veletismo de cada uno.
Como podéis comprobar, acepto críticas y soy el primero en reconocer cosas como que no me parece el momento más indicado para Dolph Ziggler tener una oportunidad titular o que llega con poca credibilidad después de todas sus derrotas anteriores. Gustarte algo/alguien no tiene porqué ser sinónimo de defenderlo a muerte aunque no tenga ningún sentido lo que dices, las personas coherentes sabemos diferenciar las cosas y no mezclar nuestro fanatismo por ese algo/alguien con la realidad. Muchos deberían aprender, en lugar de criticar. Estoy abierto a debate y leer diferentes opiniones si queréis.
Podéis comentar abajo o darme vuestra opinión en Twitter. Sabéis que lo podéis hacer hablándome a @WrestlingPhobia. ¡Saludos!
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